El capitalismo foráneo
Y mientras en el resto del mundo la fiebre consumista se calma, en España (y según uno de los guardias, en Republica Dominicana también), la termómetro sigue subiendo y a nosotros los dependientes del comercio nos toca hacer horas extras, una de momento, y dos pasado el año nuevo.
Una niñita de origen ucraniano (abundan acá las niñitas adoptadas de China y del Este) me ayuda con la venta de una maleta, quiere esta y esta otra y la de más allá, y quiere llevarse toda la tienda, yo felicito a su madre por lo bien que la niña se ha adaptado al capitalismo occidental, ella se ríe, Ucranía, en mi lista de sitios que debo visitar en Europa está una estatua (la mas grande del mundo según un libro Guiness del año de la pera que había en mi casa) de una mujer cerca de Stalingrado, debajo de su falda están enterrados los muertos del sitio por los nazis. Le pregunto a la señora y me dice que si, que ella la ha visto, pero que no sabía que del mundo era la más grande.
Puf, nos llegó ya el calendario del 2007, hay tres dias festivos que se me topan con dias libres por lo que es como si tuviera tres dias libres menos. Es fuerte lo de ver un año todo planificado y pensar que esa es mi vida. Espero sinceramente que no sea así, yo quiero seguir dando tumbos, quiero incertidumbre, aprenderme nombres de calles nuevas.
Demomento en todo caso, atrapado en Madrid, para tomar vacaciones hay que pedir turno y la fila es larga, yo que quería tomarme una semana para recorrer en marzo Milan, Parma, Bologna, Ravenna, Ferrara, Narnia y Bomarzo, ahora me tengo que conformar con un trepidante fin de semana en Roma, llegando a Ciampino y partiendo de Fiumicino. Bueno, al menos es algo.
Me ha llegado un mail con fotos de Eran en Jerusalén, donde ha caído nieve. A Eran lo conocí el año pasado en el bus a Valparaíso la noche de año nuevo, y ahora estoy más cerca de Jerusalén que de Santiago, quien lo diría. Y quien diría que en Madrid sigue a fines de diciembre haciendo sol y sin frío que justifique la compra de un abrigo caro. Anoche fui a ver "Candida" de Javier Fesser, al cine Callao (excelente, imaginen a Amelie interpretada por una abuelita empleada doméstica), y a medianoche al regresar no era necesario ni llevar bufanda.
2007, me gusta como suena, le hallo buena pinta. Para el 2007 yo quiero aprender a ir más allá de las soluciones provisorias para mi vida, encontrar un trabajo donde si me parezca apasionante pasar dos navidades seguidas. Quisiera vivir de manera que junto con trabajar me sea posible hacer algún deporte o tomar algún curso. Y bueno, si no es mucho pedir, quiero un ordenador que no se sobrecaliente y me obligue a apagarlo dos veces por vez, y una cama que no cruja, y un móvil con cámara de dos megapixeles y tarjeta de memoria de 256 megas...
Ups, pero si ese Nokia ya lo compré, y me lo entregan el 2 de enero
Pinta bien el 2007
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