Mañana de paseo por el Prado
Como seguro habrán leído en que se yó, Artes y Latas. El Museo del Prado acaba de abrir una ampliación donde ubicar parte de su gigantesca colección que estaba arrumbada en el Casón del Buen Retiro. Yo ya había ido antes a ver el edificio, obra de Rafael Moneo. Pero ayer fue la inauguración oficial, con los reyes, y la pequeña Leonor que hoy está de cumpleaños. Y desde hoy y por una semana la entrada es gratis para ver la exposición con que se inaguran los nuevos espacios, una muestra dedicada a la pintura española del siglo XIX.
La fila, como era de suponer, es inmensa.
Yo estoy inmerso en las canciones de mi ipod, orgulloso del cover de LCD Soundsystem que hacen Franz Ferdinand, la canción "All your friends". Sólo me distraen unos cuantos personajes vestidos a la usanza decimonónica que se pasea con levita y sombrilla y posan para las fotos.
Esto es España, la fila está llena de abuelitos y turistas franceses que conversan animados cada uno por su parte, y sin darme cuenta bien cómo, ya estoy metido en la conversación, huelga entonces sacarse los audífonos, supongo.
- "Aquella iglesia es una de las más antiguas de Madrid", me dice un abuelito haciendo un guiño a la Iglesia de los Jerónimos. "Todo este sector donde estamos eran antes las huertas de los Jerónimos, por eso la calle esa que está aquí se llama la calle Huertas."
- La primera piedra de la iglesia la pusieron los reyes católicos, pero tardó muchísimo en concluirse. Aunque se concluyó, no como la catedral de Oviedo, a la que le falta una torre."
Nunca sé bien aquí que hacer con estos abuelitos, si de verdad creerles todo lo que me dicen o aplicarles una ecuación matemática y quedarme con el 18%. Pero me agrada provocarles a la erudición, así que empiezo a entrevistarlo, bueno, a acicatearlo con las preguntas adecuadas, le comento que en Madrid los turistas no hacen mucho turismo de iglesias, que no es como en París o Roma. Me dice que eso es porque es Madrid una capital dentro de todo joven, pero que sí hay iglesias con obras de arte importantes, y con tumbas idem. Me cuenta que Cervantes está enterrado en las Trinitarias y Goya en la ermita de San Antonio, junto al río Manzanares. Me dice que la gran Iglesia de San Francisco el Grande se construyó pensándola como Panteón de hombres ilustres, pero al final entre guerra carlista y guerra carlista la idea degeneró a panteón de políticos ilustres, ubicado en Nuestra Señora de Atocha. Pero por muy ilustres que hayan sido, los políticos del siglo XIX español no arrastran a mucho visitante, y yo niquiera sé donde queda la Señora ésa.
Franco, Franco y Primo de River, los héroes del fascismo están en el Valle de los Caídos, que desde esta semana pasa a ser despolitizado, es decir, que se acabaron los mitines falangistas. Lo mismo que se deberán retirar los símbolos del franquismo de las ciudades contra el retiro de las subvenciones estatales. A última hora las iglesias se salvaron de esta medida.
Son más los viejitos que escuchan y comentan, y confiensan que ellos serían capaces de hablar unas tres colas seguidas. Pero esta ya ha doblado a su tercio final, noto que el silencio amenaza a la tertulia y arrojo un petardo para que esta cotunúe:
- Y cómo es entonces, si León quiere ser comunidad autónoma, eso incluiría sólo la provincia de León, o también Zamora, Palencia?
Jejeje, y saltan los abuelitos diciendo que yo soy de León, que los leones lo que queremos es no depender de Valladolid. Que las cortes de León son de las más antiguas de Europa, que viva el rey Pelayo!, y que claro, la idea es restaurar el viejo reino de León, que está muy deslucido como parte de Castilla la Vieja. Y el abuelito original, el más sabihondo, termina la discusión justo a tiempo, porque ya debemos entrar, diciendo "que los reyes católicos unieron a España, pero nunca pudieron unir a los españoles".
Adentro del museo la exhibición está muy bien, los cuadros históricos neoclásicos al estilo de los de J.L.David en el Louvre son de mucha categoría. Ya se nota como algunos generan favoritismo, en especial un cuadro de Juana la loca y otro del fusilamiento de Torrijos y de los amantes de Teruel.
Pero yo no sé quien es Torrijos o quienes fueron los amantes de Teruel, y busco a mi alrededor entre la multitud a mi abuelito sabihondo, a quien por no importunar y por no dejar que me importunase perdí de vista, y pucha que me hace falta un guía para entender algo entre tanta pintura histórica que yo sé quien era Séneca pero quien era Cincinatus, o Juan de Austria, o por qué el busto de Isabel II está cubierto por un velo, si acaso Sorolla era pedófilo o Fortuny hombre de fortuna, en fin, que es mucho lo que veo pero más lo que me pierdo. Y llego por último al salón de las musas, nueve estatuas que alguna vez estuvieron en la Villa Adriana, del emperador Adriano, en Tivoli. Y que fueron desenterradas en 1500, restauradas, recompuestas, con la mala suerte que a todas menos a una (Terpsícore, musa de la danza) les pusieron la cabeza equivocada. Y me gustaría contarle eso a alguien, pero es que igual yo también he venido solo al museo.
Cuando tenga 64, a ver si tengo más suerte y me tocan discípulos desprevenidos menos esquivos, y continuamos la conversación de la fila hasta dentro de las salas y fuera de ellas, al bar de la esquina, con un Rioja, y un brindis por los abuelitos intelectuales parlanchines, la próxima vez intentaré no perderles de vista.